Yaeji
La música de Yaeji es una invitación a explorar un íntimo y curativo mundo de exploración de identidad cultural y autoreflexión a través de producciones house de ensueño que se mutan desde confesiones en susurros hasta hits para la pista de baile. Nacida en Queens, Nueva York, de padres Coreanos, Yaeji se repatrió a Seúl poco tiempo después, donde pasó sus años formativos en la escuela, aprendiendo coreano e inglés a la par. Yaeji regresó a Estados Unidos para estudiar arte, estudios del este de asia y diseño para la comunicación en Carnegie Mellon University de Pittsburgh, Pennsylvania. Durante sus estudios, Yaeji encontró un hogar en la estación de radio de su universidad donde conoció el circuito local de música electrónica underground y noches seminales en clubes como Hot Mass; experiencias formativas que alimentaron su fascinación por la producción de música dance. Con su obsesión por la música al máximo, Yaeji se mudó a su ciudad natal y después de graduarse comenzó a cultivar su propia comunidad de artistas y DJ’s en la escena dance de Brooklyn, mientras grababa su propia música. Su primera oferta musical, el EP titulado Yaeji, encontró a la productora mezclando sus influencias de club con composiciones originales y raps brumosos oscilando entre coreano e inglés. Recientemente, Yaeji lanzó su EP2 en el cual se incluyen los sencillos “Drink I’m Sippin On” y “Raingurl”. EP2 marca el ascenso de Yaeji como una una voz singular y una de las líderes en las escenas dance, hip-hop y avant-pop.
Yaeji atribuye mucho de su crecimiento musical a su participación en la ultra exclusiva estación de radio de Carnegie Mellon. “Recuerdo siempre pensar que ese era un lugar místico y yo no entendía qué estaba pasando”, recuerda. Cuando terminó con su novio de la universidad, Yaeji decidió salir de su zona de confort y tomar el examen de admisión a la radio. “Encontré a mi grupo de amigos más cercano, a los cuales todavía frecuento, y todos amaban la música alternativa”. “Es otra forma de comunicarnos. Encontré a personas que realmente hablan mi lenguaje, a las cuales no había encontrado en toda la vida, porque siempre había oscilado entre diferentes culturas”.